Soy Josefina Brown, una trotamundos curiosa y preguntona. La desconfianza escorpiana que alumbra mi sol la he traducido en preguntas, muchas veces intelectuales como manda mi ascendente libriano. En realidad, como suelo decir, todo es más simple y también más complejo, en la astrología y en la vida.
Pero lo cierto es que buena parte de mi vida la dedico a leer y escribir, así les explico a mis hijas a qué me dedico en lo laboral. Dos actividades que realizo sin prisa y sin pausa desde chica. Amo leer, preguntar, volver a leer y volver a preguntar. Y una vez que cotejo eso con la experiencia propia o ajena, empiezo a escribir. A decir verdad, el proceso de escritura comienza a tomar forma en el mismo momento que surge la pregunta porque ese es el disparador de cualquier investigación sea científica o no (acá puede ir un link a mis investigaciones o mis publicaciones).
Así como me gusta aprender me gusta enseñar. No concibo guardarme lo que se para mí. A medida que voy descubriendo el mundo, lo voy contando. Por eso, además de la investigación siempre me he dedicado a la docencia: en grado o posgrado. Hace poco terminamos un seminario sobre ciudadanía sexual en la maestría de estudios feministas de la UNCuyo
Como la mayoría sabe una investiga aquello que por motivos personales (y/o políticos) se siente interpelada. Lo dicen los feminismos pero ya lo decía desde su emergencia la sociología del conocimiento: una no puede desprender quién es de lo que hace y tampoco de la historia que lo/a atraviesa.
Y en mi familia, las mujeres, su historia de vulnerabilidad pero también de enorme resilencia, fueron temas transversales a muchas generaciones. Y si de mujeres y vulnerabilidad hablamos imposible desligarlo de las sexualidades, las (no) procreaciones y las relaciones de poder que se tejen y destejen en derredor. Pero no sólo de preguntar, investigar, leer y escribir vive la gente…
También me gusta la astrología y el tarot que leo intuitivamente en las reuniones de fin de año con mis grupos de investigación. Para esas ocasiones también cocino, otro de mis grandes hobbies. Durante varios años, incluso di talleres de cocina para niñ@s en mi casa para la clase de mis hijas. Los intercalaba con talleres de reciclado y arte de diverso estilo con objetos útiles hechos con elementos sustentables.
Ahora, dibujo mandalas, juego con la geometría y construyo sólidos platónicos. También tengo mi altar chamánico y allí medito todas las mañanas. A veces también bailo al sonido del tambor chamánico si a lo largo del día pierdo la dirección. Varios de estos recursos también los he compartido con mis becari@s para potenciar su trabajo de investigación: todos nos llevo a un mayor bienestar, enfoque y claridad
Como ves, aprender y compartir lo aprendido van siempre de la mano en mí.
Estate atent@, en breve también te lo compartiré a vos!